① Medición de ORP de alta precisión
Emplea un método avanzado de electrodo iónico para proporcionar lecturas de ORP precisas y estables de hasta ±1000,0 mV con una resolución de 0,1 mV.
② Diseño robusto y compacto
Fabricado con plástico polimérico y una estructura de burbujas planas, el sensor es duradero, fácil de limpiar y resistente a los daños.
③ Soporte de compensación de temperatura
Permite la compensación de temperatura tanto automática como manual para una mayor precisión en condiciones ambientales variables.
④ Comunicación Modbus RTU
La interfaz RS485 integrada admite el protocolo Modbus RTU, lo que permite una integración perfecta con registradores de datos y sistemas de control.
⑤ Rendimiento estable y resistente a las interferencias
Incorpora un diseño de fuente de alimentación aislada que garantiza la estabilidad de los datos y una gran capacidad antiinterferencias en entornos eléctricos ruidosos.
| Nombre del producto | Sensor ORP |
| Modelo | LMS-ORP100 |
| Método de medición | electrodo iónico |
| Rango | ±1000,0 mV |
| Exactitud | 0,1 mV |
| Fuerza | 9-24 V CC (se recomienda 12 V CC) |
| Voltaje | 8~24 VCC (55 mA/12 V) |
| Material | Plástico polimérico |
| Tamaño | 31 mm * 140 mm |
| Producción | Protocolo RS-485, MODBUS |
1. Tratamiento de aguas residuales industriales
En las industrias química, de galvanoplastia o de impresión y teñido, el sensor monitoriza el potencial de óxido-reducción (ORP) durante los procesos de oxidación/reducción de aguas residuales (por ejemplo, la eliminación de metales pesados o contaminantes orgánicos). Ayuda a los operarios a confirmar si la reacción se ha completado (por ejemplo, si la dosis de oxidante es suficiente) y garantiza que las aguas residuales tratadas cumplan con las normas de vertido, reduciendo así la contaminación ambiental.
2. Gestión de la calidad del agua en la acuicultura
En las granjas de peces, camarones o mariscos (especialmente en sistemas de acuicultura de recirculación), el ORP refleja el nivel de materia orgánica y oxígeno disuelto en el agua. Un ORP bajo suele indicar mala calidad del agua y un alto riesgo de enfermedades. El sensor proporciona datos en tiempo real, lo que permite a los acuicultores ajustar la aireación o añadir agentes microbianos de forma oportuna, manteniendo un entorno acuático saludable y mejorando las tasas de supervivencia de los reproductores.
3. Monitoreo de la calidad del agua ambiental
En aguas superficiales (ríos, lagos, embalses) y subterráneas, el sensor mide el potencial de óxido-reducción (ORP) para evaluar la salud ecológica y el estado de contaminación. Por ejemplo, fluctuaciones anormales del ORP pueden indicar la presencia de aguas residuales; el seguimiento de datos a largo plazo también permite evaluar la eficacia de proyectos de restauración ecológica (p. ej., el control de la eutrofización de lagos), lo que proporciona apoyo a los departamentos de protección ambiental.
4. Supervisión de la seguridad del agua potable
En las plantas de tratamiento de agua, el sensor se utiliza en el pretratamiento del agua cruda, la desinfección (con cloro u ozono) y el almacenamiento del agua tratada. Garantiza una desinfección completa (oxidación suficiente para inactivar los patógenos) y evita residuos excesivos de desinfectante (que afectan al sabor o generan subproductos nocivos). Además, permite la monitorización en tiempo real de las tuberías de agua potable, protegiendo así la seguridad del agua para el consumidor final.
5. Investigación científica de laboratorio
En laboratorios de ciencias ambientales, ecología acuática o química del agua, el sensor proporciona datos de ORP de alta precisión para experimentos. Por ejemplo, puede analizar el comportamiento de oxidación de contaminantes, estudiar la relación entre temperatura/pH y ORP, o verificar nuevas tecnologías de tratamiento de agua, lo que apoya el desarrollo de teorías científicas y aplicaciones prácticas.
6. Mantenimiento de piscinas y áreas recreativas acuáticas
En piscinas públicas, parques acuáticos o spas, el ORP (normalmente entre 650 y 750 mV) es un indicador clave de la eficacia de la desinfección. El sensor monitoriza el ORP de forma continua, lo que permite el ajuste automático de la dosis de cloro. Esto reduce la necesidad de monitorización manual y previene el crecimiento bacteriano (p. ej., Legionella), garantizando un entorno acuático seguro e higiénico para los usuarios.